Por que cuando el cerebro admira una imagen de sexo dolor o muerte tiende a renegarlo, mas que el cerebro diría personas, personas que al admirar esta obra te tachan de traumatismo infantil, un trauma del que no has conseguido escapar y por ello creas cosas fuera de lo común. Con esta obra pretendo revindicar todas las teorías frente a lo que no es normal, para mi carecen de valor, puesto que lo que yo veo como un trauma es hacer siempre lo mismo,lo que dicen los demás, y no ver la realidad en la que viven, una realidad en la que existe ese dolor, el sexo y la muerte, tres temas de doble filo, que pocos seres humanos son capaces de aceptar y asimilar, y es por ello que al que lo desvincula lo tachan de traumático.
Los traumas en realidad son espacios del subconsciente, el cual los acepta como realidad, es nuestro consciente el que tiende al rechazo, no es capaz de asimilarlo y se niega cada vez que recuerda algo o lo experimenta, es por ello que cuando alguien lo descontextualiza o habla del tema es porque lo asume y a la vez es consciente, por lo tanto es un individuo que ha llegado a una racionalidad por encima del resto, esto no le hace ser superior, pero si ser racional con los temas que por excelencia son fundamentales para el ser humano.
El sexo y las fantasías son temas que padecemos todos, hasta el mas purista de los clérigos, pero como todo ser humano muchas de ellas no se mencionan ni se llevan a cabo simplemente por ser rechazado por los demás. De alguna manera es nuestro subconsciente el que nos recrea las fantasías, los deseos, las lujurias, los pecados, el morbo y tantas cosas como puedan ser imposibles para el ser humano en un mundo real, porque nuestro subcosciente nos recrea ese mundo irreal, abstracto que solo entendemos nosotros, ese mundo del cual tenemos miedo de que se haga realidad, por eso con mis obras invito un poco al espectador a recrear sus propio mundo, del cual rechaza una serie de valores conscientes de su relidad.
Con estas obras busco la identificación del espectador con su subsconciente mas surrealista, y con ello pueda reflexionar de su existencia en mundo real, puesto que si piensa es porque existe. Nuestro cuerpo como materia es primordial ante toda materia finita o infinita, pero nuestra alma que es la que escribe nuestras fantasías es primodial ante toda inmateria.
Los traumas en realidad son espacios del subconsciente, el cual los acepta como realidad, es nuestro consciente el que tiende al rechazo, no es capaz de asimilarlo y se niega cada vez que recuerda algo o lo experimenta, es por ello que cuando alguien lo descontextualiza o habla del tema es porque lo asume y a la vez es consciente, por lo tanto es un individuo que ha llegado a una racionalidad por encima del resto, esto no le hace ser superior, pero si ser racional con los temas que por excelencia son fundamentales para el ser humano.
El sexo y las fantasías son temas que padecemos todos, hasta el mas purista de los clérigos, pero como todo ser humano muchas de ellas no se mencionan ni se llevan a cabo simplemente por ser rechazado por los demás. De alguna manera es nuestro subconsciente el que nos recrea las fantasías, los deseos, las lujurias, los pecados, el morbo y tantas cosas como puedan ser imposibles para el ser humano en un mundo real, porque nuestro subcosciente nos recrea ese mundo irreal, abstracto que solo entendemos nosotros, ese mundo del cual tenemos miedo de que se haga realidad, por eso con mis obras invito un poco al espectador a recrear sus propio mundo, del cual rechaza una serie de valores conscientes de su relidad.
Con estas obras busco la identificación del espectador con su subsconciente mas surrealista, y con ello pueda reflexionar de su existencia en mundo real, puesto que si piensa es porque existe. Nuestro cuerpo como materia es primordial ante toda materia finita o infinita, pero nuestra alma que es la que escribe nuestras fantasías es primodial ante toda inmateria.
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